El concepto de outsourcing resulta del
análisis de la cadena de valor de una
empresa.
Menor costo y mayor eficiencia genera
ventaja competitiva para quien contrata.
Contratar a una fuente externa para que
realice el trabajo relacionado con los
denominados “procesos non – core”
permite a las empresas dedicar el tiempo
de la dirección, socios, gerencia y
colaboradores a las competencias
esenciales del negocio.
La gestión administrativa y financiera, la
contabilidad, las liquidaciones de
impuestos, el área societaria y las
liquidaciones de sueldos, son
actividades que, todas o alguna de
ellas, a cargo de un estudio
especializado, permiten alcanzar una
mayor eficiencia empresarial, tanto en
dichos procesos como en las actividades
centrales o propias del negocio, por la
responsabilidad de su correcta ejecución
transferida a especialistas, por el
tiempo que libera en la firma para
dedicarlo a lo fundamental del negocio y
por el ahorro que normalmente una tercerización conlleva.
En síntesis…
La idea es dejar de producir la
información para pasar a disfrutar de
ella.
Desde la perspectiva del usuario se
podría decir…
Otro lo hace (outsourcer LM&A); Yo me
beneficio de su uso (su empresa)
El “yo lo hago, yo produzco la
información” (empresa) Yo me beneficio
de su uso (empresa), en estructuras
pequeñas, personalizadas o concentradas
plantea una inconsistencia de roles que
sustrae energías a la razón de ser del
negocio, que es hacer algo (producir un
bien, ejecutar una obra o prestar un
servicio) de la mejor manera posible al
menor costo posible para otro (su
cliente).
De esta forma…
La empresa hace (lo esencial de su
negocio) y otro (su cliente) se
beneficia de su producto o servicio.
El resto es nuestra tarea, manteniendo
Usted el control de los procesos al
establecer los objetivos, formas y
condiciones del servicio. |